En una sesión especial marcada por intensos debates, la oposición logró imponerse con 13 votos contra 11, rechazando la rendición de cuentas del ejercicio 2024 presentada por el Intendente Ghi. Las críticas se centraron en la ejecución presupuestaria, la falta de transparencia, el déficit presentado y la escasa inversión en áreas clave como seguridad.
El Honorable Concejo Deliberante de Morón vivió una jornada impactante al rechazar, por mayoría, la rendición de cuentas correspondiente al ejercicio fiscal 2024. La votación culminó con 13 votos en contra y 11 a favor. La 13 votos de la oposición, conformada por bloques de LLA, UCR, Juntos y PRO, se unieron para cuestionar la gestión financiera del municipio y del intendente Lucas Ghi. El presidente del bloque opositor mayoritario, Ezequiel Tozzi de LLA sostuvo:“Hoy estamos aquí para levantar cada uno de los concejales de la oposición la voz por cada moronense que no encuentra una explicación razonable para los impuestos que paga”.
El oficialismo, representado por los 10 concejales de Unión por la Patria y el monobloque de Adrián Colonna (de Vertiente Peronista), defendió la gestión, aunque sus 11 votos no fueron suficientes para revertir la tendencia adversa. A diferencia de la votación de la rendición de cuentas del año pasado, en aquella ocasión el bloque de Colonna contaba con una mano más: la de la concejal Daniela Cáceres, quien esta vez se inclinó por una postura opuesta a la que venía sosteniendo. Tanto Colonna como Cáceres —a pesar de haber sido electos por Juntos por el Cambio— venían votando sistemáticamente junto al bloque oficialista, pero esta fue la primera vez que Cáceres se alineó con el resto de la oposición.
Según lo establecido por la Ley Orgánica de las Municipalidades (N° 10.869), cada intendente debe presentar su rendición de cuentas antes del 31 de marzo de cada año. El Concejo cuenta con un plazo de 60 días para tratar el expediente. En paralelo, el documento es elevado al Tribunal de Cuentas de la Provincia, que cumple la función de auditar y expedirse sobre la legalidad del uso de los recursos públicos.
Durante el debate, el presidente del bloque de Unión por la Patria, Diego Spina, fue el único orador del oficialismo. Reconoció un déficit operativo de 4.688 millones de pesos y atribuyó parte de las dificultades financieras a los recortes del gobierno nacional. Spina regresó este año al recinto legislativo, tras haber sido desplazado de su cargo en el Ejecutivo en medio de la interna entre Ghi y el sector de Martín Sabbatella.
La apertura de la dicción por parte de la oposición, luego del largo monologo del concejal Diego Spina, fue encabezada por el presidente de la bancada LLA, Ezequiel Tozzi: “Después de revisar los expedientes de pago, que tuvimos oportunidad de recibir para la rendición de cuentas, correspondientes al ejercicio 2024, podemos decir con todas las letras que no hay control, que no hay transparencia y que sobre todo no hay respeto por el dinero del contribuyente”.
Las principales críticas de la oposición se centraron en la ejecución del gasto, el destino de los recursos y el déficit generado. Señalaron la falta de eficiencia y transparencia en la administración, decisiones discrecionales en el uso de los fondos, una preocupante subejecución en diversas áreas, y el aumento de tasas que enfrentan los vecinos de Morón, quienes, además, no ven reflejados esos incrementos en la calidad de los servicios que el municipio debería garantizar.

Crónica de una sesión protagonizada por una floja defensa del oficialismo y una contundente crítica de la oposición que logró imponerse.
Comenzó la sesión con la alocución del presidente de la bancada peronista, Diego Spina. Al inicio de su discurso sostuvo: “Esta rendición de cuentas tiene una cuestión política y tiene una cuestión técnica también muy interesante y muy bien planteada. Nosotros nos hacemos cargo de todo lo realizado por el gobierno de Lucas (Ghi), nos hacemos cargo del déficit, sabemos que los estados son deficitarios y hay un debate para reducir el déficit”.
Luego de casi 45 minutos ininterrumpidos y varias páginas leídas, donde el concejal del Bloque de Unión Por la Patria intentaba resaltar las prioridades abordadas por la gestión oficialista y atenuar sus deficiencias cargando de culpas al gobierno Nacional, afirmó: “Tengan la plena seguridad que el equipo económico el año pasado lo hizo con absoluta conciencia”, aunque sus palabras se contrariaban, sobre todo por su propia admisión del déficit presentado para el ejercicio en cuestión.
El inicio del contundente argumento de la oposición fue presentado por el presidente del bloque LLA, Ezequiel Tozzi, quien apunto: “El Estado gasta lo que antes le quitó al ciudadano, y ese gasto evidentemente no es transparente y por lo tanto no es justo, es un atropello, por eso hoy estamos aquí para levantar cada uno de los concejales de la oposición la voz por cada moronense”.
El concejal se centró en exponer la poca transparencia y eficiencia en la ejecución del gasto que se realiza en el distrito: “Están maquillando las cuentas públicas y esto es algo casi crónico en el municipio de Morón. El resultado es una ficción contable. Una puesta en escena que insulta la inteligencia del contribuyente, en palabras más claras, les cierra el Excel, pero no les cierra la realidad”. Y continuó: “Usan herramientas técnicas para disfrazar una gestión que cada vez está más alejada de la eficiencia, de la rendición de cuentas real y del respeto por el esfuerzo de quienes pagan los impuestos”.

Seguidamente, la concejal María Traverso de LLA centró su discurso en refutar el argumento del oficialismo, que atribuía todos los problemas a los recortes por parte del gobierno nacional. En ese marco, destacó que existen obras que ya deberían estar finalizadas —algunas incluso desde 2023—, pero que aún presentan avances inconclusos, a pesar de los fondos que fueron gastados. Además, cuestionó la colocación de carteles que afirman “obra paralizada por el gobierno nacional”, cuando, en realidad, muchas de esas obras ya tendrían que estar terminadas hace años.
También se explayó en los fondos que se destinaban a publicidad, y el gasto irrisorio en dicha materia, a través de diversos ejemplos como los millones destinados a medios casi desconocidos, la contratación compulsiva de proveedores para la realización de actos y eventos, entre ellos, los festejos del día de Morón donde se gastaron más de 44 millones, o en la promesa a la bandera más 56 millones, y hasta la innecesaria contratación de máquinas de humo.
Por su lado, el concejal Faro arremetió: “Cuando tuvimos la rendición de cuentas el año 2023, analizamos un mensaje del poder ejecutivo, donde el intendente nos maquillaba un superávit”, sobre el cuál “después de una investigación y estudio de la oposición pudimos demostrar que eso es mentira”. Ahora analizando el 2024 aparece un déficit de ejercicio, de 4.688 millones de pesos – afirmó – es el déficit más grande en la historia del municipio. Y, aun así, la deuda real asciende mucho más que ese número maquillado.
También remarcó que, aunque el propio intendente reconoció que el tema de seguridad es la principal demanda, el gasto en dicha área es totalmente insatisfactorio. “En seguridad, en el año 2024, se ejecutó un 40% menos”, “subejecutaron el presupuesto, solo se gastaron 7.000 millones de pesos, y de ese monto, cabe aclarar que el gasto fue para el personal, se pagaron sueldos”.
Mientras que en seguridad no ejecutaron un 40%, a comunicación le subieron un 52%: “En comunicación gastaron 900 millones promedio, en pauta publicitaria y propaganda” – comparando – “Un patrullero promedio cuesta 30 millones de pesos”, es decir, si esos 900 millones mencionados los hubiesen destinado a móviles, hoy el municipio de Morón contaría con 30 patrulleros más.

Continuó la concejal Silvina Samparisi: “En el ejercicio 2024 la recaudación de la tasa creció un 194%”, “esta situación, sin embargo, no impidió que el ejercicio cerrara una vez más con un déficit presupuestario y un déficit financiero. Por eso, a pesar de haber obtenido una recaudación por arriba de la inflación, se cerró con un déficit presupuestario de unos 4.688 millones de pesos y un déficit financiero de 5.953 millones de pesos”.
La ejecución de nuevos programas, la aparición y desaparición de secretarías, sin mayores explicaciones, y varias sobreejecuciones significativas – como el programa denominado simplemente “Gobierno”, que pasó de un presupuesto inicial de 523 millones a una ejecución de 1.751 millones (un incremento del 236%), entre otros ejemplos similares, revela que “existen distorsiones considerables entre el presupuesto aprobado y el vigente”.
“La Secretaría de la Mujer y Género contó con un presupuesto de 806 millones de pesos, gasto destinado fundamentalmente a sueldos, sin embargo, este importante gasto no se ve reflejado en acciones concretas para la prevención y acompañamiento a las víctimas de violencia de género”. “Si sufrís violencia, Morón no te ayuda, no te alienta y te deja tirado. Quienes hayan estado cerca de alguna víctima de violencia en el distrito habrán sido testigos. Tal como le pasó a una vecina de acá de Morón. Sufrió violencia de género por parte de su ex esposo, el que tenía una perimetral. Cuando llegó a la secretaría la atendieron y le entregaron un teléfono para que pudiera llamar al 144. Esa fue toda la ayuda y contención que recibió. Cero acompañamiento, cero contención. Todavía está esperando el llamado del municipio” – sentenció la concejal.

Luego de ella, el presidente del bloque Juntos, Mones Ruiz, hizo una elocuente alocución, donde cuestionó la falta de limpieza e higiene en las áreas céntricas y criticó lo que calificó como un “excesivo gasto político” por parte de la gestión de Ghi. Señaló que la administración cuenta con más de 450 funcionarios, cuyos salarios dejaron de publicarse en línea, y cuyo costo anual supera los 6 mil millones de pesos.
También recalcó sobre el aumento de tasas que enfrentan los vecinos y los comerciantes, que además no ven traducidos en las prestaciones que debería garantizarles el municipio. La Tasa de Servicios Generales (TSG) aumentó casi el doble por encima de la inflación en el mismo período, además de seguirse cobrando irrisoriamente tasas como la del COVID.
Para ir finalizando, antes de la votación el concejal Diego Spina mencionó que hay que “votar a conciencia política, como me parece que va a ocurrir el día de hoy, que se va a votar en función de lo que la política partidaria indica y no en función de los números. Eso sí, es obediencia debida”.
El presidente del Bloque LLA, Ezequiel Tozzi, había sostenido al respecto: “Nosotros creemos que la libertad económica no se defiende desde el discurso, se defiende con hechos, con cuentas claras, con eficiencia en el gasto y con responsabilidad fiscal”. “Cuando no se rinde cuentas de verdad, no hay una república, hay un simulacro de república. Por todo esto, nosotros no podemos acompañar esta rendición de cuentas. Y no crean que es una cuestión ideológica, es una cuestión de honestidad”.
Y efectivamente así sucedió, la oposición conjunta no acompaño la rendición de cuentas presentada por el Ejecutivo y terminó imponiéndose por 13 votos contra 11.
