Mitre y Morón igualaron sin goles. Costantino falló un penal clave sobre el final del primer tiempo.
En un duelo intenso y disputado, Deportivo Morón sumó un punto en su visita a Santiago del Estero, donde empató 0-0 ante Mitre. Aunque el resultado no refleja el trámite del partido, el conjunto del oeste bonaerense mostró una imagen ambiciosa, especialmente en la segunda mitad, donde hizo méritos suficientes para quedarse con los tres puntos.
El encuentro comenzó con ambos equipos estudiándose, sin asumir riesgos en los primeros minutos. Fue Mitre quien ofreció la primera señal de peligro cuando, a los 10 minutos, Rosales desbordó por izquierda en una gran jugada individual, dejó a tres hombres en el camino y habilitó a Batista, que remató al palo en lo que fue la ocasión más clara del local en todo el partido.
A partir de allí, el trámite se volvió más trabado y equilibrado en la mitad de la cancha. Morón logró reordenarse en defensa y neutralizó los intentos del rival, aunque en ofensiva le costó gravitar. Sin embargo, sobre el cierre de la primera etapa llegó una jugada inesperada que pudo haber cambiado la historia: tras un córner sin mayores consecuencias, Wiechniak sujetó innecesariamente a Lorenzón dentro del área. El árbitro no dudó y cobró penal. Costantino tomó la responsabilidad, remató cruzado y el arquero Jachfe, atento, se lució desviando el disparo con las piernas.
La segunda parte mostró otra cara del “Gallo”. Más decidido y con una postura ofensiva, adelantó sus líneas e hizo circular mejor la pelota. A los dos minutos, Yair González probó con un zurdazo bajo que pasó cerca del palo derecho, en lo que fue un anticipo de lo que vendría.
A los 9, el visitante generó una jugada colectiva de gran nivel: Sanguinetti desbordó por la derecha, tocó con Ferreira, y el centro de este encontró solo a Bíttolo, cuyo zurdazo fue salvado milagrosamente sobre la línea por Wiechniak, en una de las más claras del encuentro.
Morón siguió insistiendo y, a los 20 minutos, Costantino volvió a estar cerca con un potente disparo desde afuera que se fue apenas alto. Del otro lado, Mitre no logró inquietar a Salvá, salvo por un tanto bien anulado a Manenti por posición adelantada.
Con el correr de los cambios y el desgaste físico, el ritmo del partido fue decayendo. A pesar del empate, el rendimiento de Morón dejó sensaciones positivas: se sobrepuso a bajas sensibles, mantuvo su propuesta y controló gran parte del juego en un terreno complejo.
El conjunto de Otta continúa en la pelea por el ascenso y suma confianza de cara al próximo compromiso, cuando reciba a Chaco For Ever, otro rival directo en la lucha por ingresar al reducido.
