El intendente argumentó su ausencia en una pericia por un rechazo a último momento de un perito. Mientras tanto, la defensa de la modelo Melody Rakauskas solicita que se establezca una nueva fecha para la evaluación y que se le impida viajar al estar procesado por abuso sexual, advirtiendo sobre el riesgo de fuga.
Fernando Espinoza, intendente de La Matanza, no se presentó a una pericia psiquiátrica programada en el marco de la causa por abuso sexual en su contra, lo que ha generado controversia. La ausencia del funcionario se debió, según su defensa, a un inconveniente con la aceptación de un perito propuesto por la querella, lo que llevó a que el estudio no se pudiera realizar.
En un comunicado, la defensa de Espinoza explicó que el intendente se presentó al juzgado, pero fue informado de que la fiscal Mónica Cuñarro había rechazado la participación de un psicólogo de la querella por no ser psiquiatra, mientras que sí aceptó a una psicóloga propuesta por la defensa. Esto impidió la realización de la pericia, argumentaron.
El abogado de Rakauskas, Marcelo Urra, criticó el manejo de la fiscalía, indicando que el rechazo se notificó a última hora y reclamó una nueva fecha para el peritaje. En su escrito, Urra también señaló que Espinoza parece faltar al respeto al sistema judicial al priorizar actos partidarios sobre sus obligaciones legales.
Además de su ausencia a la pericia, Espinoza ha solicitado permiso para viajar a Barcelona entre el 31 de octubre y el 9 de noviembre, donde participará de un seminario sobre “Ciudades Inteligentes”. La defensa de Rakauskas se opone a este viaje, argumentando que el intendente podría evadir la justicia dado su poder económico y conexiones.
Espinoza planea alojarse en un hotel de lujo en Barcelona, entregando copias de sus pasajes aéreos como parte de su solicitud. Sin embargo, la querella considera que esto representa un riesgo de fuga.
En agosto, Espinoza apeló su procesamiento por abuso sexual y desobediencia a la justicia ante la Cámara de Casación Nacional. Por su parte, Rakauskas ha pedido que la causa avance a juicio oral y público, lo cual fue respaldado por la jueza de instrucción María Fabiana Galetti al aceptar su carácter de querellante, lo que le permite solicitar pruebas en el proceso.
La Cámara de Crimen ya había confirmado en junio el procesamiento de Espinoza, lo que mantiene en suspenso la posibilidad de un juicio oral mientras se resuelven las apelaciones pendientes.
