Una mujer de 46 años lucha por su vida tras ser arrastrada por un delincuente que le robó el auto frente a una escuela. La víctima, que había ido a buscar al hijo de una amiga, quedó gravemente herida y permanece en coma inducido.
El caos y la violencia irrumpieron a la salida de clases del turno mañana del colegio Don Bosco. Allí, M.L.M. (46 años) fue víctima de un robo que derivó en una escena desgarradora. La mujer, que había ido a retirar al hijo de 13 años de una amiga, dejó su Chevrolet Agile con el motor en marcha al bajar del vehículo. En cuestión de segundos, un delincuente aprovechó el descuido para subirse al auto y emprender la huida.
Al percatarse del robo, M.L.M. intentó impedirlo agarrándose de la ventanilla del conductor. Sin embargo, el atacante no cedió: aceleró bruscamente, arrastrándola por más de 100 metros sobre el asfalto, hasta que el impacto la desprendió con violencia en la intersección de Avenida de Mayo y Humboldt.
Testigos del hecho relataron la conmoción que generó la escena. “Vi a la mujer en el suelo, inconsciente, rodeada de gente. Llegó la ambulancia, pero ya estaba muy mal”, comentó una vecina que presenció los momentos posteriores al ataque.
Graves heridas y pronóstico reservado
Tras el brutal forcejeo, la víctima sufrió un traumatismo craneoencefálico severo, fracturas en el brazo y la clavícula, hematomas generalizados y una hemorragia interna. Fue trasladada de urgencia al Hospital Paroissien de Isidro Casanova, donde los médicos la indujeron a un coma farmacológico para estabilizar su condición.
Según fuentes cercanas a la familia, “las próximas 72 horas son críticas”, ya que se detectaron pequeños coágulos en su cerebro y una isquemia que complican su recuperación. “Tiene respirador artificial y no pueden enyesarle las fracturas por ahora”, explicó la madre del niño que M.L.M. iba a buscar.
La investigación y el móvil del crimen
La Fiscalía N.º 8 de La Matanza, a cargo de Alejandra Núñez, investiga el caso bajo la carátula de “robo agravado y lesiones”. Las autoridades ya habrían identificado a un sospechoso, mientras agentes de la Comisaría 2.ª de Ramos Mejía rastrean cámaras de seguridad para determinar la ruta de escape.
El vehículo robado sigue sin aparecer, y se teme que el delincuente lo haya abandonado en otra jurisdicción o lo utilice para cometer más ilícitos.
Un eco de otro crimen atroz
El hecho revive el recuerdo del asesinato de Kim Gómez, la niña de 7 años que en La Plata murió tras ser arrastrada 15 cuadras durante el robo del auto de su familia. En aquel caso, un menor de 17 años fue detenido y enfrenta prisión preventiva.
Mientras tanto, la comunidad del colegio Don Bosco se moviliza en apoyo a la familia de M.L.M., organizando cadenas de oración y pidiendo justicia. “Es un acto de cobardía. Esperamos que encuentren al responsable”, expresó un familiar en las puertas del hospital.
